JOSÉ

La historia de José se relata en Génesis del capítulo 37 al 50. Es una narración donde no interviene visiblemente Dios aunque toda la historia va encauzada a consolidar el pueblo de Israel.

El odio de los hermanos de José hacia él se debe por varias razones. Primero, José acusa a sus hermanos ante el padre de su mal comportamiento. Segundo, el padre le regala una túnica con mangas mostrando así su preferencia por José, y tercero, José cuenta unos sueños que tiene, dando a entender en esos sueños que es superior a sus hermanos y padres.

La túnica regalada por su padre es de manga larga. Es una prenda que sólo usaban personas importantes y príncipes, con ello ya nos está dando a entender la importancia de José. Los sueños anticipan un futuro importante para José.

Los hermanos le tienen tanto odio que quieren matarlo (37,18) le defienden Rubén y Judá. Parece que hubo dos tradiciones donde valoran a estos dos hermanos que abogan por salvarle la vida. Los hermanos le echan a un pozo seco. Su salida del pozo se presenta como un acto simbólico que representa una nueva vida que va a comenzar José.

Yahvé está con él y todo lo que hace produce grandes frutos, nos da una clave religiosa Dios está con la persona buena y fiel a Él. Trabaja para Putifar que confía en él, José muestra su lealtad y gratitud hacia los hombres y hacia Dios. La esposa de Putifar le acusa injustamente y es encarcelado.

En la cárcel entabla amistad con el copero y el  panadero del faraón a los que interpreta sus sueños correctamente pero no se atribuye a él los aciertos sino que considera la interpretación de los sueños como un don de Dios (40,8) porque sólo Él conoce el futuro y nos lo puede mostrar.

En los sueños del faraón hay que descubrir el poder de Yahvé. En Egipto había muchos y grandes sabios y magos pero su ciencia es superada por Dios. El faraón recompensa a José nombrándole visir de todo Egipto. También se emparenta con uno de los grandes sacerdotes casándose con una de sus hijas con la que tiene dos hijos Efraín y Manasés.

Los hermanos de José van a Egipto a comprar grano y cuando reconoce a sus hermanos les hace sufrir, pero es más fuerte su sentimiento de amor y se da a conocer a sus hermanos y les pide que traigan a su padre para abrazarlo. El faraón invita a toda la familia a vivir en Egipto.

Jacob al final de su vida bendice a José, le pide que cuando muera sea enterrado fuera de las tierras de Egipto. También bendice a los hijos de José y los adopta como hijos suyos para así ser partícipes de la herencia prometida por Dios a su padre.

En el capítulo 49 Jacob bendice a todos sus hijos, más que bendiciones son oráculos que van a definir el destino de sus hijos o mas bien el destino de las tribus que llevan su nombre.